El fin de una era, Internet Explorer desapareció para siempre el pasado 14 de febrero. El cambio viene con una actualización automática para Microsoft Edge y todos los datos del Explorer se trasladarán al nuevo navegador.
A partir del 14 de febrero dejó de funcionar definitivamente el predecesor de Microsoft Edge en los dispositivos Windows 10, hablamos de Internet Explorer. Aunque esto no es sorpresa, ya que Microsoft ya había dejado de darle soporte el 30 de noviembre de 2021.
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Ahora, todos los accesos directos de Internet Explorer enviarán directamente a Microsoft Edge. También, los datos de navegación automáticamente se trasladarán a este navegador para que no haya problemas en la continuidad de los usuarios en su navegación.
Una vez que se aplique la actualización, los usuarios ya no podrán revertir tal cambio a menos que reinstalen completamente el sistema operativo para así bloquear la actualización que desactiva el navegador.
La primera versión de Internet Explorer nació en 1995 para acompañar a Windows 95; en 2015 la compañía reemplazó a ese navegador por Edge, que usa el mismo software que Google Chrome.
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