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Se puede ampliar la placa de video en una notebook?

Muchos gamers que usan una notebook para jugar se preguntan si es posible mejorar el rendimiento gráfico de sus laptops. Especialmente cuando se trata de ejecutar juegos o programas exigentes, la placa de video existente puede quedar obsoleta. Una solución viable sería ampliar la placa de video, pero ¿es realmente posible en una notebook? Este artículo explora las opciones disponibles para mejorar el rendimiento gráfico en laptops.

Primero, analizaremos si es factible reemplazar la placa de video en una notebook. Luego, revisaremos los modelos compatibles que permiten este cambio. Además, brindaremos consejos para determinar si tu laptop es apta para una actualización gráfica. Por último, exploraremos la opción de una placa de video externa (eGPU) como alternativa para ampliar las capacidades gráficas de tu notebook.

¿Se puede cambiar la placa de video de una Notebook?

En la mayoría de los casos, no es posible cambiar la placa de video de una notebook de forma directa. Sin embargo, existen algunas excepciones y alternativas que debemos considerar.

Tarjetas gráficas integradas (iGPU)

Muchas notebooks vienen con una tarjeta gráfica integrada (iGPU) en el mismo chip que el procesador. En estos casos, la GPU está soldada a la motherboard, por lo que no se puede reemplazar ni actualizar de forma independiente.

Tarjetas gráficas con ranura de expansión

Algunas notebooks, especialmente las que están diseñadas para gaming o trabajo intensivo, cuentan con una ranura de expansión para tarjetas gráficas dedicadas. Estos modelos utilizan un conector propietario llamado MXM (Mobile PCI Express Module) que permite instalar una GPU dedicada.

En estas notebooks, es posible reemplazar la tarjeta gráfica por un modelo más nuevo, siempre y cuando se respeten las especificaciones del conector MXM y se encuentre un módulo compatible.

Tarjetas gráficas dedicadas

Las notebooks con tarjetas gráficas dedicadas suelen tener dos chips principales:

  1. CPU: El procesador central.
  2. GPU dedicada: Una placa de video discreta con su propia memoria VRAM.

Aunque la GPU dedicada está integrada en la placa base, es un componente independiente del procesador. Sin embargo, no es posible reemplazarla directamente, ya que está soldada a la placa.

Placas de video externas (eGPU)

Una alternativa viable para mejorar el rendimiento gráfico en una notebook es utilizar una tarjeta gráfica externa (eGPU). Esta solución implica conectar una GPU dedicada a través de un puerto Thunderbolt 3 o USB-C.

Las eGPU ofrecen una potencia gráfica superior a las GPU integradas y, en algunos casos, pueden superar el rendimiento de las GPU dedicadas de las notebooks. Además, permiten actualizar la tarjeta gráfica en el futuro sin necesidad de reemplazar todo el equipo.

En resumen, mientras que la mayoría de las notebooks no permiten cambiar directamente la placa de video, existen opciones como las ranuras MXM y las tarjetas gráficas externas que brindan la posibilidad de mejorar el rendimiento gráfico de forma más flexible.

Modelos compatibles de notebooks para cambiar la placa de video

Módulos MXM

Dado que la mayoría de las notebooks no son posibles realizarles éste cambio, traemos algo de esperanza para identificar las excepciones que utilizan un estándar llamado MXM (Mobile PCI Express Module). Estos modelos cuentan con una ranura de expansión que permite instalar una tarjeta gráfica dedicada en un módulo extraíble.

Hay dos tipos principales de módulos MXM:

  1. MXM-A
    • Dimensiones: 82 mm de ancho y 70 mm de longitud
    • Potencia máxima: 55 W
    • Diseñado para tarjetas gráficas con buses de memoria de 64 o 128 bits (2 o 4 chips de memoria)
  2. MXM-B
    • Dimensiones: 105 mm de longitud
    • Potencia máxima: 200 W
    • Diseñado para tarjetas gráficas con interfaces de memoria de 192 o 256 bits (6 u 8 chips de memoria)

Para saber si tu notebook es compatible con el cambio de la placa de video AMD o Intel, debes verificar si cuenta con un módulo MXM. Esto implica abrir la carcasa y buscar una tarjeta gráfica separada de la placa base principal. Puedes preguntarle directamente al fabricante, ver el manual o buscar en la web de la marca también.

Consideraciones importantes

Al reemplazar la tarjeta gráfica en un módulo MXM, es importantísimo tener en cuenta las siguientes consideraciones:

  1. Tipo de MXM: Asegúrate de adquirir un módulo MXM del mismo tipo (MXM-A o MXM-B) que el instalado en tu notebook.
  2. Consumo de energía: Verifica que el nuevo módulo MXM tenga un consumo de energía similar al anterior para evitar problemas de refrigeración.
  3. Compatibilidad térmica: Algunos módulos MXM de alta gama pueden requerir sistemas de refrigeración más potentes que no sean compatibles con tu notebook.
  4. Dimensiones: Confirma que el nuevo módulo MXM encaje correctamente en el espacio disponible dentro de la carcasa de tu notebook.
  5. Sensibilidad: Debes tener cuidado cuando manipulas componentes cerca de la motherboard para no dañarlos dado que es un componente robusto pero a la vez sensible a las malas manipulaciones.

Cómo ampliar con una placa de video externa (eGPU)

Requisitos: Puerto Thunderbolt 3

Para poder utilizar una placa de video externa (eGPU) con una notebook, como primer paso, hay que verificar que cuente con un puerto Thunderbolt 3. Este puerto de alta velocidad, basado en el conector USB-C, permite la conexión de dispositivos de gran ancho de banda, como una tarjeta gráfica dedicada.

El puerto Thunderbolt 3 ofrece una velocidad de transferencia de datos de hasta 40 Gbps, lo que permite el envío y recepción de información entre la eGPU y la notebook de manera fluida. Además, proporciona hasta 100W de potencia de carga, suficiente para alimentar la mayoría de las notebooks modernas.

Comprar una carcasa externa para eGPU

Una vez que se ha verificado que la notebook cuenta con un puerto Thunderbolt 3, el siguiente paso es adquirir una carcasa externa diseñada específicamente para alojar una placa de video dedicada. Estas carcasas, conocidas como cajas eGPU, están disponibles en diferentes modelos y marcas, como Razer Core, ASUS ROG XG Station 2, HP Omen Accelerator y Gigabyte GTX 1070 Gaming Box.

Al elegir una carcasa eGPU, es importante considerar factores como la potencia de la fuente de alimentación, la conectividad adicional (puertos USB, Ethernet, etc.) y las dimensiones máximas de la tarjeta gráfica compatible. Una fuente de alimentación de 450W a 500W suele ser adecuada para la mayoría de las configuraciones de eGPU.

Instalar la placa de video en la carcasa

  1. Desembala la carcasa eGPU y sigue las instrucciones del fabricante para abrir la carcasa de manera segura.
  2. Identifica la ranura de expansión PCI Express x16 dentro de la carcasa, donde se instalará la tarjeta gráfica.
  3. Retira con cuidado la placa de video Intel o AMD de su embalaje y asegúrate de sujetarla correctamente para evitar dañar los componentes.
  4. Alinea la placa de video con la ranura PCI Express x16 y presiona firmemente hasta que encaje en su lugar.
  5. Asegura la placa de video utilizando los tornillos o mecanismos de sujeción proporcionados por el fabricante.

Conectar la carcasa a la notebook

  1. Conecta el cable Thunderbolt 3 (suministrado con la carcasa eGPU) al puerto Thunderbolt 3 de la notebook.
  2. Conecta el otro extremo del cable Thunderbolt 3 a la carcasa eGPU.
  3. Enchufa el cable de alimentación de la carcasa eGPU a una toma de corriente.
  4. Enciende la notebook y la carcasa eGPU.
  5. En algunos casos, puede ser necesario realizar ajustes en la BIOS o en los controladores de la notebook para habilitar el uso de la eGPU.

Una vez que la conexión se ha establecido correctamente, la notebook debería detectar y utilizar la placa de video externa para tareas gráficas intensivas, como juegos, edición de video o aplicaciones de diseño. Es importante tener en cuenta que, aunque la eGPU puede mejorar significativamente el rendimiento gráfico, no siempre alcanzará el mismo nivel de rendimiento que una tarjeta gráfica instalada internamente en un equipo de escritorio.

Conclusión

En conclusión, aunque la mayoría de las notebooks no permiten cambiar directamente la placa de video, hay algunas excepciones y alternativas viables. Las notebooks compatibles con módulos MXM brindan la posibilidad de reemplazar la tarjeta gráfica dedicada por un modelo más potente, siempre que se respeten las especificaciones de consumo energético, refrigeración y dimensiones. Por otro lado, las placas de video externas (eGPU) ofrecen una opción flexible y escalable para ampliar las capacidades gráficas de una notebook mediante el puerto Thunderbolt 3.

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